España es uno de los países con mayor potencial en algunas industrias que pocos conocen. Uno de ellos es la viticultura, y se demuestra con la gran cantidad de viticultores españoles que existen en la actualidad.
Son más de 2.150 millones de euros que aporta este sector a la industria agrícola en nuestra región, lo que demuestra que es un nicho que cada vez aporta más a la economía nacional.
Ahora bien, de esta cantidad de dinero, un gran porcentaje proviene de una serie de viticultores que se han convertido en unos maestros en la extracción y procesamiento del vino. ¿Te animas a descubrir quiénes son?
Los mejores viticultores españoles de la actualidad
La industria de la creación del vino cada vez tiene más adeptos, y es que no solo se trata de su potencial económico, sino que es una bebida que tiene múltiples propiedades y suele tener un sabor tan exquisito que llama la atención de muchas personas.
Es como convertir una pasión en un negocio rentable. ¿Qué te parece?
Si ese es tu sueño, es momentos de que conozcas la historia de 4 viticultores españoles que están dando de qué hablar en este 2023:
Raúl Pérez
Comenzamos con los vinos de Raúl Pérez, uno de los mejores viticultores españoles en la actualidad.
Nacido en 1972 y se le considera como uno de los enólogos más relevantes de todo el planeta. Su primera añada para la bodega familiar la abrió en 1994 y fue parte fundamental de la revolución del vino que hubo en la década de los 90.
Su ambición fue tan grande que en el 2005 abandonó el proyecto familiar y decidió emprender su propio negocio denominado “Bodegas y Viñedos Raúl Pérez”, convirtiéndose en poco tiempo en un líder en el campo del Bierzo.
A partir de aquí amplió sus operaciones, ya que ha desarrollado vinos con otros productores como Rías Baixas y Tierra de León. En la actualidad el vino que más produce es el Ultreía, que se consigue en todo el territorio español.
Verónica Ortega
En segundo lugar, tenemos a Verónica Ortega, una mujer de origen gaditano y que llegó al sector después de trabajar durante mucho tiempo de la mano de Álvaro Palacios y Daphne Glorian en diferentes bodegas de gran renombre.
Verónica es considerada como parte de la nueva generación de productoras de vino. De hecho, en algún momento colaboró con Raúl Pérez y se independizó al 100% en el 2010.
En la actualidad trabaja de forma orgánica en cinco hectáreas de viñedo que está compuesto en la mayor parte del terreno por Mencía, Valenciana y Palomino. De esta manera, produce más de 40.000 vinos al año y se dividen en seis diferentes vinos: Quite, ROC, Cobrana, CAL, Kinki y la Llorona.
Carlos Sánchez
Ahora es turno de hablar de Carlos Sanchez, un viticultor y pequeño bodeguero que es aficionado a las viñas donde exista la posibilidad de hacer vino del bueno.
Luego de un largo camino en el que colaboró con varios compañeros, en 2020 decide arrancar por su propia cuenta con vinos provenientes de viejos viñedos que eran alquilados en una propiedad de San Vicente.
Entre sus vinos más famosos están Las Bacantes, Sedal 2020, y La Esquirla del Bardallo.
Álvaro Loza
Por último y no menos importante tenemos a Álvaro Loza. Se trata de alguien que es oriundo de Haro y es enólogo de profesión. En estos momentos se encuentra en La Rioja, dónde está estudiando el potencial de la zona para elaborar vinos de distintos tipos.
Su vida ha sido como la de un nómada, y es que ha viajado por toda Europa para aprender más sobre el noble oficio de la viticultura.
Este profesional tiene como filosofía trabajar en aquellas viñas que son más viejas para crear vinos con gran potencial. De esta manera, aprovecha los terrenos que dejan de lado los grandes productores para hacerse con una parte del mercado.
Es así cómo ha logrado desarrollar tres vinos diferentes: Contacto, Labastida y San Vicente de la Sonrierra.
Ventajas de la viticultura
Son muchas las ventajas que presenta la viticultura para la economía de un país. Algunas de ellas son:
Viabilidad de la tierra
No podíamos comenzar de otra manera que no fuera con la viabilidad de la tierra. Con esta industria no se necesitan grandes herramientas ni máquinas para poder crear una unidad de producción, lo que favorece a los movimientos ecológicos que hay por doquier.
Para que la viticultura sea un éxito es importante tratar de la mejor manera posible a la tierra para sacarle el máximo proyecto. Por lo tanto, usaremos los recursos de la mejor manera posible.
Conservación de los recursos naturales
Muy relacionado con el punto anterior. Hoy en día existe una gran denuncia sobre el mal trato que tienen los recursos naturales de nuestro país.
Miles de tierras fértiles se pierden año tras año gracias a prácticas imprecisas que dañan los terrenos y matan a la fauna que hay alrededor. Sin embargo, con la viticultura se logra todo lo contrario, preservar nuestros recursos para crear empleos de gran valor para la sociedad.
Control de calidad sobre las uvas
Todos sabemos que las uvas son la materia prima del vino. El detalle está en que no todas las uvas se pueden usar, ya que es imprescindible que cumplan una serie de requisitos para que estén aptas para el consumo humano con alcohol.
Esta industria permite clasificarlas según su calidad, desechando aquellas que no cumplen con los parámetros adecuados. Estas últimas podrían usarse para el sector gastronómico general o la repostería.
¿Ya sabes cuál es tu viticultor español preferido? No cabe duda de que nuestro país ha dado grandes referentes en la industria, así que es momento de que elijas el preferido para ti.