La empresa familiar Bodegas Lozano de Villarrobledo, ha renovado su equipamiento de seguridad adquiriendo nuevos sistemas autónomos de respiración y medidores de oxígeno para la próxima campaña.
La vendimia, esa época donde se recoge el esfuerzo que se ha ido realizando durante todo el año, comienza prácticamente a mediados de agosto y suele acabar a finales de octubre.
Durante este periodo, son muchas las personas que trabajan en los diferentes procesos para la elaboración del vino, tanto en Bodegas como en el campo.
Es por ello, por lo que Bodegas como Lozano, en Villarrobledo, revisan y actualizan todas las normas y protocolos, ofreciendo un entorno seguro para el desempeño laboral.
Desde el departamento de RRHH y prevención de riesgos laborales de esta empresa, se realizan estudios y seguimientos adaptando la más moderna tecnología a los procesos más tradicionales de elaboración de los vinos en los que la seguridad siempre es lo más importante. En Lozano, a pesar de ser una de las empresas de su sector que menos índice de siniestralidad laboral tiene de Castilla la-Mancha, ha adquirido recientemente varios equipos de autónomos de respiración y medidores de oxígeno.
Según afirma Jaime Lozano, gerente de esta empresa familiar, “la vendimia es una época de mucha ilusión y sobre todo de mucho trabajo de mucha gente, y para que todo salga muy bien, debemos estar perfectamente organizados, equipados y formados. En nuestras instalaciones, es obligatorio cumplir minuciosamente todas las normas de seguridad que hay establecidas por mínimas que sean”.
Además, según afirman desde Bodegas Lozano, todos los trabajadores independientemente del puesto de trabajo, realizan obligatoriamente un curso de prevención de riesgos laborales especializado en el que se le informa de cómo hacer uso de equipos e instalaciones de manera correcta.